TEMA 2. LA DOCTRINA DEL KARMA
Para comenzar este tema, lea el Capítulo XI “Karma” en El Océano de la Teosofía, y tome notas breves sobre las ideas principales que le sorprenden. Estas notas se pueden organizar junto con las notas del curso en un índice de archivo adecuado. La doctrina gemela de la Reencarnación es la del Karma; una Ley que es universal, inquebrantable y eterna.
En palabras de Robert
Crosbie: “Tenemos que asumir, que o bien éste es un universo de ley o un
universo de caos, azar, accidente. De hecho, sabemos perfectamente bien que no
es un universo de azar, porque todo lo que usamos y entendemos vemos que está
bajo ley; y donde algo nos sucede, cuya causa no podemos discernir, asumimos,
no obstante, que hay una causa y tratamos de encontrarla. Ni siquiera podemos
imaginar un efecto sin causa.” El Filósofo Amigo. RC
Esta ley que nos afecta es la ley de acción y reacción, y
una de las afirmaciones más familiares de la misma es la de San Pablo cuando
dijo: "Todo lo que el hombre siembre eso también cosechará."
En Lucas encontramos otra declaración, "porque con el mismo rasero que
midáis, seréis también vosotros medidos." De hecho, afirmaciones de la ley
del Karma se encuentran en las enseñanzas de cada gran maestro a lo largo de la
historia. Buda habló de esta manera en la declaración de apertura del
Dhammapada, "Todo lo que eres es el resultado de lo que has pensado."
La Teosofía tiene mucho que decir sobre esta importantísima
ley, dando una visión de sus significados más profundos e indicando los efectos
de su aplicación en situaciones varias; y la mayoría de las claves para la
comprensión de esta idea básica se encuentran en "Aforismos sobre
Karma". Estos aforismos fueron publicados por primera vez por W.Q.
Judge en 1893 y estaremos citándolos a lo largo de este tema.
"No hay Karma a menos que exista un ser que lo cree o
sienta sus efectos." (Aforismo 1)
"Karma es el ajuste de los efectos que fluyen de las
causas, durante el cual, el ser sobre y a través de quien éste se efectúa,
experimenta dolor o placer." (Aforismo 2)
"Karma es una tendencia constante e infalible en el
Universo a restaurar el equilibrio, operando incesantemente." (Aforismo 3)
En otra parte de la enseñanza se describe como la tendencia
a restablecer el equilibrio en el mundo físico y la armonía rota en el mundo
moral. Es la ley benéfica de la causalidad ética que nos permite ver nuestros
pensamientos y actos como los ven los demás, para sentir el efecto completo de
ellos, cuando "se nos paga con la misma moneda".
Debemos comprender que las acciones no se producen por sí
mismas, que el Karma no origina nada. Nosotros los “electores” establecemos las
causas y el Karma nos trae los efectos de esas elecciones. Somos nosotros
quienes tenemos que asumir sus efectos.
Como dijo W.Q. Judge: “El efecto no es más que la
naturaleza del acto y no puede existir separado de su causa. El Karma solamente
produce la manifestación de lo que ya existe; siendo acción tiene su operación
en el tiempo, y del Karma puede por lo tanto decirse que es la misma acción
desde otro punto del tiempo. Debe, más aún, ser evidente que no solamente hay
una relación entre la causa y el efecto, sino que debe haber además una
relación entre la causa y el individuo que experimenta el efecto.” (Artículo,
"Karma")
Las ideas que mantenemos sobre nuestra propia naturaleza,
acerca de la Deidad, sobre la ley y sobre la Naturaleza, determinan nuestras
acciones y las causas que ponemos en movimiento. Están estacionadas en lo
profundo de nosotros mismos y según llegan a la superficie, influyen en cada
elección y acto nuestro.
Para comprender el Karma debemos entender que esta Ley no
está fuera de nosotros, sino que es inherente a nuestra naturaleza más elevada.
Desde cierto punto de vista, es esa voz siempre presente dentro de nosotros que
habla por la justicia. Esto es el Karma.
POR QUÉ, ENTONCES, ¿VEMOS INJUSTICIA POR TODAS
PARTES?
Bajo la ley del Karma no puede haber injusticia. Lo que
vemos como injusticia nos parece así porque somos incapaces de ver la imagen
completa, las causas que han producido los efectos que vemos o los efectos por
venir de las causas que observamos.
En el libro de W.Q. Judge Un Epitome de la Teosofia
él afirma
“…la existencia del mal, del sufrimiento y la pena… [es] un
desesperado rompecabezas para el mero filántropo o teólogo. …
las desigualdades en condición social y privilegios,
inteligencia y estupidez, cultura e ignorancia, virtud y vileza; la aparición
de hombres con genio en familias desprovistas de él, además de otros hechos en
conflicto con la ley de herencia; …todos esos problemas sólo tienen solución o
bien por la teoría convencional del capricho Divino o bien por las doctrinas
teosóficas del Karma y la Reencarnación. “
Cuando vemos, como ocurre a menudo, a un buen hombre
sufriendo mucho en su vida, es porque en una vida anterior ha hecho cosas que
ahora requieren ajuste. Citando al Sr. Judge de nuevo: “Y de manera similar, el
hombre malvado que está libre de sufrimiento, feliz y próspero, lo es así
porque en una existencia previa había sido tratado mal por sus semejantes o
había experimentado mucho sufrimiento”. Ecos del Oriente
Pero cometeríamos un error si viéramos al Karma como
únicamente un castigo y una recompensa. El funcionamiento de la ley es la más
perfecta justicia, ya que nos trae, tarde o temprano, exactamente lo que nos
merecemos, exactamente lo que hemos enviado hacia la vida. Pero va más allá de
esto, en la medida en que nos trae esas experiencias, situaciones, encuentros
que son lo mejor para nuestro aprendizaje y continuo avance espiritual a través
de la evolución. Si podemos ver el Karma bajo esta luz, será una ley muy
beneficiosa, nuestra mejor amiga.
Se ha dicho que los Maestros de la Sabiduría son Karma, ya
que han llegado a la condición en la cual Ellos manifiestan esta armonía y
justicia interior en todo lo que hacen. Aunque Ellos no simplemente se sientan
cómodamente y dejan que la ley haga su trabajo de retribución y recompensa. Sus
vidas están completamente dedicadas a ayudar a la humanidad, aunque no
interfiriendo con la ley. (Hay una verdad divina aquí sobre la que
profundizaremos más adelante). En el Bhagavad-Gita, Krishna, el Maestro
Divino, afirma: “Yo me produzco entre las criaturas, ¡oh, hijo de Bharata!,
cada vez que hay un descenso en la virtud y una insurrección de vicio e
injusticia en el mundo; y por lo tanto yo me encarno de edad en edad para la
preservación de los justos, la destrucción de los malvados, y el
establecimiento de la justicia".
¿ES EL KARMA LO MISMO QUE EL DESTINO?
Esto, por supuesto, plantea la cuestión de si el hombre
tiene o no en realidad libre albedrío. Pero para encontrar una respuesta a esta
vieja pregunta primero tenemos que descartar la idea de que tiene que ser
"sí" o "no", de que tiene que ser una cosa o la otra. La
Teosofía dice que en realidad tiene que ser ambas. Bajo la ley del Karma
estamos sujetos tanto al destino como al libre albedrío. Cada acto que hemos
realizado en el pasado nos ha "predestinado" a recibir sus efectos en
algún momento. Esto es de hecho el destino; pero es un destino de nuestra
propia creación y de nuestra propia libre elección. Estamos constantemente
tomando decisiones dado que el hombre es básicamente un elector. Y estamos así
constantemente "destinándonos" a nosotros mismos a sentir los efectos
de esas decisiones.
Por otro lado, en todo momento tenemos la opción de cómo
vamos a encontrarnos con ese Karma. Podemos resentirnos y culpar a algún otro o
a algo por ello, podemos tratar de evitarlo con la esperanza de que vaya a
desaparecer, o podemos aceptarlo como algo que creamos y aprender una lección
muy valiosa de él. Nosotros en todo momento tenemos la elección, incluso aunque
a veces sea una pequeña, de cómo tomarlo y qué hacer a continuación. Tanto si
somos conscientes como si no, tenemos una interdependencia con todos los seres,
o "vidas" con los que nos dotan con nuestros instrumentos; cuerpos,
cerebros, etc. Nosotros dependemos de ellos para todo nuestro contacto con la
vida en este plano; y recíprocamente, ellos dependen de nosotros para su
posterior evolución.
Tal y como los tratamos, creamos nuestras propias
limitaciones o construimos aliados útiles para nuestro avance mutuo. Creamos
esas condiciones en las que estamos "predestinados" a encarnar - los
lugares, las asociaciones, así como las diversas capacidades. Un hábito nos
pre-destina hasta que nos hacemos cargo de él y re-destinamos ese hábito.
Incluso cuando parece que estamos completamente avocados a algún implacable
destino, aún podemos ejercer nuestro poder para elegir y comenzar un rumbo que
nos librará de esta situación que parece irresoluble.
Sobre esto, Robert Crosbie dice: “Si no nos gusta el
"destino" que nos acontece, los efectos que nos rodean, las
condiciones que nos engloban, todo lo que tenemos que hacer es poner en marcha
un tipo de causas que producirán otros y más deseables efectos. Pero tenemos
que hacerlo; nadie más puede hacerlo por nosotros. Nadie nos detiene. Nadie nos
impulsa hacia adelante.... Cada uno de nosotros contiene dentro de sí mismo las
mismas posibilidades que existen en cualquier lugar y en todas partes en el
universo. Debemos ver que incluso ahora, por más obstaculizados que podamos
estar como resultado de una acción equivocada en el pasado, no hemos perdido y
nunca podemos perder nuestro poder para establecer otras y mejores causas en
movimiento.” El filósofo amigo. RC
¿TIENEN LAS RAZAS Y NACIONES SU PROPIO KARMA?
El Karma de cualquier raza o nación es el resultado directo
de los pensamientos y actos de los Egos que conforman esa raza o nación.
Considerado desde el punto de vista de la interdependencia humana, debemos ver
que el agregado de Karma individual se convierte en el de la nación a la que
esos individuos pertenecen, y más allá, la agregación de todos los Karmas
nacionales se convierte en el Karma del mundo. Las características que
sustentan y forman la “personalidad” de una raza o nación se pueden remontar a
las ideas o ideologías que forman las bases para pensar y actuar, ideas que
demasiado a menudo no son cuestionadas sino "patrióticamente"
defendidas.
El aforismo 29 afirma, "El Karma de una raza o Karma
racial, influencia a cada individuo de esa raza por medio de la ley de la
Distribución. El Karma nacional actúa en los miembros de una nación por acción
de la misma ley, más concentrada…"
W.Q. Judge explica además en su artículo,
"Karma": “Realmente, la ley de la economía es la que subyace en estos
términos y los explica. Tomemos, por ejemplo, una nación con ciertas
características especiales. Éstas son el plano de expansión para cualquier
entidad cuyo mayor número de afinidades están en armonía con esas
características. La entidad entrante, siguiendo la ley de la menor resistencia
se encarna en esa nación, y todos los efectos kármicos, que siguen a tales
características, se acumularán al individuo.”
En El Océano de la Teosofía se dice que la masa
total de Egos seguirá encarnándose y reencarnándose juntos en una nación o raza
en particular hasta que hayan resuelto las causas que han creado. La raza o
nación puede, por sí misma, encarnarse con diferentes nombres y en diferentes
localidades, pero la ley dicta que los Egos trabajen juntos para aclarar sus
obligaciones mutuas, o mejor aún, sus mutuos malentendidos.
H.P.B. nos da otra visión sobre este mismo tema. “Es una
ley oculta, además, que ningún hombre puede elevar a una forma superior sus
fallos individuales, sin levantar, aunque sea muy poco, todo el cuerpo del cual
él es una parte integral. Del mismo modo, nadie puede pecar, ni sufrir los
efectos del pecado a solas. En realidad, no existe tal cosa como “separación”;
y la mayor proximidad a ese estado egoísta que las leyes de la vida permiten,
está en la intención o el motivo.” La Clave de la Teosofía.
¿CUÁNDO HACE EFECTO NUESTRO KARMA PASADO?
W.Q. Judge introduce la cuestión de que, "...El Karma
es la continuación del acto, y para que cada línea particular de Karma se
ejercite en sí, es necesario que se dé la base del acto que engendró ese Karma
en el cual puede ser inherente y operar."
“En la vida de los mundos, razas, naciones e individuos, el
Karma no puede actuar a menos que se haya provisto un instrumento apropiado y
esté disponible para esa acción. Y hasta que ese instrumento apropiado se
encuentre, el Karma relacionado con éste permanecerá en suspenso.” (Aforismos
14, 15)
“Mientras que un ser esté experimentando acción kármica en
un instrumento apropiado, su otro Karma permanecerá en suspenso sin extinguirse
por ningún otro ser o medio, sino que más bien permanecerá en reserva para su
efecto futuro. Mientras tanto, el lapso de tiempo, durante el cual esta acción
kármica no se siente ni disminuye su fuerza ni cambia su naturaleza.” (Aforismo
16)
Se puede haber creado Karma, en el sentido de que las
causas se hayan puesto en marcha y otros hayan sentido los efectos, pero en un
momento concreto puede que no estemos en una posición o condición en la cual
poder tratar con él de manera beneficiosa. Una razón para esto es que otro
Karma esté funcionando tan fuertemente, que mantiene esta reacción en suspenso
para ser activada en algún otro momento. La Ley no sólo es justa, sino que es
beneficiosa ya que proporciona la reacción kármica cuando el Ego está en la
mejor posición posible para aprender del retorno de sus acciones.
"Lo apropiado de un instrumento para la operación del
Karma, consiste en la exacta relación y nexo entre ese Karma y el cuerpo, la
mente y la naturaleza intelectual y psíquica que ha adquirido el Ego para su
uso durante una vida. Todo instrumento usado por cualquier Ego en una vida es
apropiado para el Karma que opera a través de él." (Aforismos 17, 18)
"El Karma puede
ser de tres clases: (a) el que está activo en el presente y en esta vida por
medio de instrumentos apropiados; (b) el que está siendo creado ahora,
almacenado para agotarse en el futuro; (c) el karma acumulado en una vida o
vidas anteriores y todavía inactivo porque lo impide el carácter inapropiado
del instrumento que está en uso por el Ego, o lo impide la intensidad del Karma
que opera en el presente." (Aforismo 22)
En otro leemos: "Pueden ocurrir cambios en el
instrumento durante el curso de una vida para hacerlo apropiado a un nuevo tipo
de Karma, y esto puede ocurrir de dos maneras: (a) por la intensidad de un
pensamiento y el poder de un voto o juramento, o (b) por medio de cambios
naturales debidos a la extinción de causas anteriores." (Aforismo 19)
Esto explica los casos de individuos que han sufrido
repentinos cambios de fortuna adversos o mejoras en circunstancias tanto
externas como internas. Aunque el viejo Karma debe resolverse y no puede ser
detenido hasta que haya llegado a su fin, es sabio por nuestra parte pensar y
actuar ahora, bajo las actuales circunstancias, no importa cuáles sean, sin
producir causas malas o perjudiciales para nuestro próximo renacimiento o para
los últimos años de esta vida.
¿QUÉ PARTE DE NOSOTROS SE VE AFECTADA POR EL
KARMA?
Probablemente convendremos en que tiene sentido que el
Karma, tanto bueno como no tan bueno, debería afectarnos en esa parte de
nuestra naturaleza en la que pasamos la mayor parte del tiempo. El Karma no
puede afectarnos donde no estamos. Se mantiene en suspenso hasta que estemos en
una posición acorde con la naturaleza de la causa. El Karma no cambia, nosotros
somos las variantes.
William Q. Judge explica: “Pero la acción tiene muchos
planos a los que puede ser inherente. Está el plano físico, el cuerpo con sus
sentidos y órganos; luego está el plano intelectual, la memoria, que enlaza las
impresiones de los sentidos en un todo consecutivo y la razón que pone en
ordenada disposición su almacén de hechos. Más allá del plano del intelecto
está el plano de la emoción, el plano de preferencia de un objeto en lugar de
otro: el cuarto principio del hombre. Estos tres, físico, intelectual y
emocional, se ocupan por completo de los objetos de la percepción sensorial, y
pueden llamarse el gran campo de batalla del Karma. También está el plano de la
ética, el plano de la discriminación de: 'debo hacer esto, no debo hacer lo
otro'. Este plano armoniza el intelecto y las emociones. Todos estos son los
planos del Karma o acción: qué hacer y qué no hacer. Es la mente como base del
deseo la que inicia la acción en los diversos planos, y es sólo a través de la
mente como los efectos del reposo y la acción pueden ser recibidos.” Artículo “Karma”
Dependiendo de nuestra comprensión de la naturaleza completa del hombre y del propósito de la vida, gastamos la mayor parte de la energía de toda una vida en uno o más de los planos mencionados antes - el físico, el mental, el emocional o el ético - y por tanto, establecemos un centro de atracción que traerá Karma a realizarse en este nivel. El Karma tiene que volver a nosotros donde está nuestra atención y nuestra devoción. Si no fuera así, sería de poco valor en nuestra evolución. En todo momento, a lo largo de nuestras vidas, el Karma nos traerá los resultados deseables y no tan deseables de nuestras acciones pasadas donde estamos mentalmente "posicionados" en el momento.
¿PODEMOS HACER ALGO PARA CAMBIAR NUESTRO KARMA?
No podemos cambiar el Karma. Es una ley absoluta. Pero
logrando cambios en nosotros mismos podemos alterar los efectos. El hombre
siempre tiene una elección, y si no pudiera hacer algo acerca de su situación
éste sería un mundo sin esperanza.
Sabemos por experiencia que cuando vienen malos momentos
siempre tenemos una opción de cómo tomarlos, cómo reaccionar ante ellos.
Podemos llorar y quejarnos o podemos sacar provecho de la situación y aprender
la lección en cuestión. En un caso hemos sufrido un poco, perdido una
oportunidad de oro para desarrollar fuerza, y probablemente enviado el Karma a
visitarnos de nuevo en otro momento.
En el otro caso nos hemos separado a nosotros mismos de los
hechos en la medida en que podemos aprender de lo que está sucediendo, viendo
este Karma como la consecuencia lógica y legítima de una acción que nosotros
pusimos en movimiento.
El apego en un plano u otro es la causa de nuestro
sufrimiento. Nos permitimos apegarnos a las cosas de la vida que son
transitorias y no permanentes, y sufrimos cuando la ley se las lleva. Todo
vuelve a la mente. No podemos tener apego por cosas en las que no pensamos. Por
lo tanto, para suavizar el dolor de lo que llamamos "mal karma",
deberíamos fijar nuestros pensamientos en lo que está detrás de los efectos,
las causas, los principios y lecciones involucradas y en el funcionamiento de
la propia Ley. Aquí se da otra respuesta a esta pregunta:
"Las medidas tomadas por un Ego para reprimir
tendencias, eliminar defectos, y para contrarrestar estableciendo causas
diferentes, alterarán el impulso de una tendencia kármica y abreviarán su
influencia en relación directa a la intensidad o debilidad de los esfuerzos
hechos al llevar a cabo las medidas adoptadas." (Aforismo)
Robert Crosbie muestra cómo el karma fortalece la
naturaleza del alma: “La única manera en la que podemos disminuir los efectos
del mal Karma es tomar la actitud correcta ante él. Cuando vienen buenos
tiempos, podemos sembrar buenas causas; cuando vienen malos tiempos, todavía
podemos tratar de sembrar buenas causas, utilizando la oportunidad para ganar
fuerza, coraje y comprensión de la vida. Parece que estamos siempre tratando de
evitar el mal Karma, y obtener un buen karma para nosotros mismos, mientras que
lo que deberíamos hacer es hacer uso de todo tal y como llega. De esta forma,
pagamos nuestras deudas a un deudor que no podemos evitar, nosotros mismos. No
ponemos esfuerzo en tratar de evitar cualquier cosa, sino que vamos
directamente a trabajar en lo que está ante nosotros. Entonces el alma comienza
a actuar, la voluntad comienza a actuar, y el poder de la voluntad se
incrementa.” Answers to Questions on the Ocean of Theosophy
Ésta no sólo es la forma inteligente de actuar, sino la
manera más práctica de hacer frente a lo que pensamos que es mal Karma.
¿QUÉ CONSTITUYE BUEN O MAL KARMA?
Por lo que hemos aprendido en la sección previa, podemos
ver que en realidad no existe tal cosa como buen o mal Karma. Cualquier cosa
que vuelve a nosotros debe ser esa situación, esa lección, que, para nosotros
es la más ventajosa en ese momento particular.
Dado que es una acción de nuestra propia elección e
invención volviendo frente a nosotros, a menudo nos presenta un problema que
desearíamos poder dejar a un lado; pero también nos presenta una gran
oportunidad y el desafío idóneo para que afloren la voluntad y la sabiduría que
llevarán a superar este obstáculo "personal" que se interpone en el
camino de nuestro progreso. Si no fuera por estos "obstáculos" nunca
tendríamos razones para llamar a nuestra fuerza interior que es la raíz de
nuestro ser.
Robert Crosbie afirma: “¿No es cierto que ahora podemos
echar la vista atrás y sonreír ante cualquier cosa “mala” que nos haya ocurrido
en el pasado? Nos pareció horrible en su momento, pero ha pasado, y podemos ver
que de esas mismas cosas vino algo de ganancia, de fuerza y sabiduría. Bajo la
ley nadie puede enfrentarse a un obstáculo que no es capaz de superar; el
obstáculo no es más que una oportunidad para él de librarse de algún defecto
que ahora posee. A menudo, justo las cosas que parecen más difíciles para nosotros
prueban ser las más beneficiosas.” El Filósofo Amigo.
Creamos estas situaciones que vuelven a nosotros como lo
que llamamos Karma desagradable porque hemos olvidado las leyes de la vida y
las leyes de nuestra Naturaleza Interna. Cuando tomemos la posición del Alma -
el Ego reencarnante - seremos capaces de tomar una actitud diferente y más
constructiva hacia cada evento que nos llega; viéndolo no como un obstáculo,
sino como un paso, que al ser escalado nos colocará en un territorio más
elevado, con una visión más clara y un sentido de logro interior.
SI AYUDAMOS A OTROS ¿ES ESO INTERFERIR CON SU
KARMA?
"Las causas kármicas que ya se han puesto en acción
deben dejarse a su propio impulso hasta que se extingan. Sin embargo, esto no
permite a ningún ser humano el negarse a ayudar, tanto a sus semejantes como a
todo ser sensible." (Aforismo 12)
Esto nos pide tomar un punto de vista diferente sobre la
pregunta. Debemos ver que ayudar y ser ayudado no es interferir, sino al
contrario, es en realidad cumplir la ley. Esta es la forma en la que se supone
que el hombre debe actuar, la manera en la que se produce la evolución
Espiritual. Más allá de eso está la cuestión de si tenemos o no el poder de
interferir con el Karma. Es una ley universal e inquebrantable.
En la vida no estamos inactivos ni por un momento, ni nunca
verdaderamente solos. Estamos constantemente actuando en algún plano, incluso
si es solo con el pensamiento; y nuestras acciones están con, a través o sobre
otros seres de alguna forma. Esto conlleva una elección siempre presente –
¿ayudamos o impedimos? No podemos actuar, no podemos hacer nada en la vida sin
afectar a otros seres de alguna forma por esas acciones. La creciente
conciencia de la interdependencia de toda vida está finalmente trayendo a la
humanidad una conciencia de responsabilidad de tratar a nuestros semejantes
como hermanos en el mismo camino. La "rueda de la vida" se puede
mantener girando en una de dos maneras, hacia adelante con acciones que ayudan,
o hacia atrás con acciones que dificultan. La Ley nos da la opción.
El verdadero problema es, ¿cómo podemos realmente ayudar a
otro? Muchas veces queremos ayudar y tratamos de ayudar, pero encontramos que
hemos hecho más daño que bien. Al parecer, se necesita gran sabiduría para
saber cómo ayudar a otro, y debido a esto tenemos la tentación de renunciar al
esfuerzo. Pero una vez que entendemos algo de la verdadera naturaleza del
hombre, podemos extraer algunas reglas para guiarnos. Tal vez sean algo como
esto. Nuestro objetivo debería ser siempre ayudar a otros a ayudarse a sí
mismos. Debemos ayudar siempre a aquellos que no pueden ayudarse a sí mismos. Y
nunca deberíamos hacer el deber de otro, privándole así de una experiencia
necesaria.
Si nos tomamos la molestia de pensar sobre la ayuda que nos
es dada por los Grandes Maestros, los Maestros de la Sabiduría, encontraremos
que en todos los casos Ellos siguen esta guía. Ellos nos traen las Leyes
fundamentales de la Vida y nos recuerdan el hecho de nuestra naturaleza eterna
y omnipotente, por lo tanto, nos dan los medios y el aliento para ayudarnos a
nosotros mismos. Y más allá de eso, Ellos ofrecen una mano abierta siempre
dispuesta a ayudarnos cuando quiera que tomemos el más pequeño paso en Su
dirección, en la dirección de la Fraternidad Universal.
LECTURAS RECOMENDADAS
Una de las mejores Fuentes de información avanzada en el
tema del Karma es el folleto “Karma” que contiene no solamente la
lista completa de los Aforismos del Karma, sino además diez artículos
adicionales del Sr. Judge sobre diferentes aspectos del tema.
El Océano de la Teosofía le
dará la enseñanza básica sobre el tema, y Answers to Questions on the
Ocean of Theosophy contemplará y arrojará luz sobre muchas de las
preguntas que usted pueda tener. Estos libros son utilizados de forma periódica
como base para la Clase de Estudio. Hay un folleto de la ULT, el No. 6 sobre el
“Karma” y otros artículos de W.Q. Judge.
Para más avanzadas y siempre interesantes visiones sobre el
funcionamiento de la ley del Karma, puede interesarle leer lo que H.P.B dice
sobre éste en varios lugares de La Clave de la Teosofía. Siempre
es muy gratificante ir directamente a las fuentes originales (Ver en Biblioteca
Online, enlace abajo)
LECTURA RECOMENDADA, de “Un Epítome de la
Teosofía” por William Q. Judge
LA TEOSOFÍA, La Religión-Sabiduría, ha existido desde
tiempo inmemorial. Nos ofrece una teoría de la naturaleza y de la vida que está
fundada en los conocimientos adquiridos por los Sabios del pasado,
especialmente aquellos del Oriente; y sus estudiantes más avanzados sostienen
que este conocimiento no es imaginado ni es inferido, sino que es un
conocimiento de hechos vistos y conocidos por aquellos que están dispuestos a
cumplir con las condiciones requeridas para verlo y conocerlo.
Teosofía, significa conocimiento de o acerca de Dios (no en
el sentido de un Dios personal antropomórfico, sino de esa sabiduría divina), y
siendo el término "Dios" universalmente aceptado como incluyendo todo
lo existente, lo conocido y lo desconocido, de ahí que la Teosofía debe
significar sabiduría respecto al Absoluto; y puesto que el absoluto no
tiene principio ni fin, esta sabiduría debe de haber existido siempre.
Por lo tanto, a la Teosofía se le llama a veces la Religión-Sabiduría
porque desde tiempo inmemorial ha tenido conocimiento de todas las leyes que
rigen en lo espiritual, lo moral y lo material.
La teoría que ofrece para explicar la naturaleza y la vida
no ha sido formulada especulativamente y después probada ajustando hechos o
forzando conclusiones, sino que es una solución al problema de la existencia,
cósmica e individual, resultante del conocimiento obtenido por quienes han
adquirido el poder de ver a través del velo con que la naturaleza oculta sus
operaciones a la mente ordinaria. Tales Seres son llamados Sabios, usando el
término en su más alto sentido. En estos últimos años han sido llamados Mahatmas
y Adeptos.
En los tiempos antiguos eran llamados Rishis y Mahârishis,
esta última palabra que significa Grandes Rishis.
No pretendemos decir que estos seres elevados, o Sabios,
sólo han existido en el Oriente. Se sabe que han vivido en todas partes del
globo, en obediencia a las leyes cíclicas que las que se hablará más tarde.
Pero por lo que concierne al desarrollo actual de la raza humana en este
planeta, se sabe que se encuentran ahora en Oriente, aunque en verdad puede ser
que, en tiempos remotos, algunos de ellos hayan llegado desde las costas
americanas.
Habiendo por necesidad varios grados entre los estudiantes
de esa Religión-Sabiduría, es claro que los que pertenecen a los grados menores
sólo pueden comunicar los conocimientos que corresponden a su grado, y que
dependen, aun hasta cierto punto, para más información de los estudiantes aún
más avanzados. De estos estudiantes superiores es de quienes se dice, que lo
que saben no es cuestión de meras inferencias, sino que se relaciona con
realidades vistas y conocidas por ellos. Algunos de ellos están en contacto con
la Sociedad Teosófica, y sin embargo, están muy por encima de ella.
El poder de ver y conocer absolutamente tales leyes está
rodeado por regulaciones inherentes, las cuales deben ser obedecidas como
condiciones preliminares; por lo tanto, no es posible satisfacer las preguntas
y las demandas del hombre de mundo que pide una explicación inmediata de esta
sabiduría, puesto que no es posible que él la comprenda hasta que él cumpla las
condiciones.
Como esta sabiduría trata de leyes, y estados de materia, y
de modos de entender no soñados por el "práctico" mundo Occidental,
sólo puede aprenderse poco a poco, a medida que el estudiante avanza en la
tarea de demoler una a una las ideas falsas y preconcebidas que son debidas a
teorías erróneas o incompletas.
Estos estudiantes superiores nos dicen que especialmente en
el mundo Occidental, ha prevalecido por muchos siglos un método de razonar
falso, que ha resultado en un hábito universal de la mente que hace tomar los
efectos por causas, y mirar lo que es real como ilusorio, mientras que sitúan a
lo ilusorio en el puesto de lo real y verdadero. Como un pequeño ejemplo,
citaremos los fenómenos del mesmerismo y la clarividencia, que, hasta hace poco
tiempo, ha negado la ciencia Occidental, a pesar de haber numerosas personas que,
por evidencia introspectiva incontrovertible, saben de cierto la verdad de
estos fenómenos, y, en algunos casos, comprenden su causa y su modo de ser. “Un
Epítome de la Teosofía” WQJ
(Tema 2. La Doctrina del Karma. Curso de Teosofía
Original. Versión 2023.
Este trabajo lo inició un Grupo de estudiantes de Teosofía
Original en 2020, finalizado en 2023)
Biblioteca Online:
Teosofía
Original: BIBLIOTECA TEOSÓFICA ONLINE (teosofiaes.blogspot.com)
Web de Teosofia Original: Teosofía
Original: LISTA DE ARTÍCULOS POR TEMAS (teosofiaes.blogspot.com)
CURSO DE TEOSOFÍA ORIGINAL ONLINE, gratuito y en español
CONTENIDO DEL CURSO:
1. Reencarnación
2. Karma
3. Los Maestros de Sabiduría, fuente de la Teosofía
4a. La Mente y la Conciencia
4b. La Mente Personal y Universal
5a. El Cuerpo Astral
5b. Los poderes del cuerpo astral
6. Estados después de la muerte
7a. El sueño y los sueños
7b. Visiones y Meditación
8. Ciclos
9a. Evolución de la Mente y la Materia Cósmicas
9b. Evolución de la Conciencia
10. Leyes psíquicas