26 de febrero de 2023

Mercurio. El planeta misterioso.

 Mercurio. El planeta misterioso





De la Revista THEOSOPHICAL MOVEMENT ( India)

Vol 74. / Diciembre 2003 / nº2



EL PLANETA Mercurio, o Budha, es el que se encuentra más cerca del Sol y se dice que recibe de él siete veces más luz y calor que nuestra Tierra, mientras que el hermoso Venus sólo recibe el doble que la Tierra. Así que no hay duda de que "Mercurio es, como planeta astrológico, aún más oculto y misterioso que Venus". (D.S, II, 28)

También ocupa un lugar muy importante en la Mitología antigua, ya que representa esotéricamente el principio de Buddhi-Sabiduría, y por lo tanto se identifica con el dios de la Sabiduría, conocido bajo varios nombres. En un lugar de La Doctrina Secreta el Planeta Mercurio o Budha es designado como el "Señor de la Sabiduría" (II, 27), y en otro lugar se dice que "los hombres del Señor de la Sabiduría (Mercurio Budha), no los hijos de Soma (la Luna), son inmortales" (II, 44). El día de la semana que lleva el nombre de este planeta, Budha-Miércoles, era también, se nos dice, "sagrado tanto para Hermes como para Thot". (II, 367)

Además, "la Mitología Antigua incluye la Astronomía antigua así como la Astrología. Los planetas eran las manecillas que señalaban, en el dial de nuestro sistema solar, las horas de ciertos acontecimientos periódicos. Así, Mercurio era el mensajero designado para dar la hora durante los fenómenos solares y lunares diarios, y estaba relacionado por lo demás con el Dios y la Diosa de la Luz". (I, 389 y ss.)

Es sobre la sólida base de la Ciencia del Zodíaco que se han levantado las antiguas teogonías, y uno no puede sino "asombrarse ante la idea de que los días de Mercurio (miércoles), Venus (viernes), Júpiter (jueves), Saturno (sábado) y otros estén relacionados con los días de la semana en el mismo orden y con los mismos nombres en la India que en el norte de Europa". (I, 652)

La clara enseñanza teosófica de que cada ser humano está dotado de la facultad divina de Buddhi, que puede desarrollarse mediante la autopurificación y el entrenamiento espiritual requeridos, así como el hecho de que Buddhi es el cofre de oro que sirve de vehículo en el que un Rayo del Absoluto se enfoca y se vuelve indivi-dualizado- estas verdades han sido expresadas en forma velada y alegórica, al parecer, en las palabras de Mercurio a través de sus oráculos: "Yo soy aquel a quien llamáis Hijo del Padre (Júpiter) y de Maia. Dejando al Rey del Cielo (el Sol) vengo a ayudaros, mortales" (II, 542). Podemos comprender bien, por lo tanto, la afirmación de Madame Blavatsky de que "Mercurio cura a los ciegos y restaura la vista, mental y física". (Ibid.)

Hay una hermosa alegoría sobre el nacimiento de este planeta Budha que está llena de profundo significado. El soma, la bebida sagrada que beben los brahmanes y los iniciados durante sus misterios y ritos sacrificiales, es realmente simbólico del fruto del Árbol del Conocimiento, y por esta razón el soma nunca se daba antiguamente a los brahmanes no iniciados, los simples Grihasta o sacerdotes del ritual exotérico.

Así pues, Brihaspati - "gurú de los dioses" aunque lo fuera- representaba todavía la forma de adoración de las letras muertas. Es Tara, su esposa, el símbolo de aquel que, aunque casado con la adoración dogmática, anhela la verdadera sabiduría, quien aparece como iniciada en sus misterios por el Rey Soma, el dador de esa Sabiduría. Así, en la alegoría, Soma se la lleva. El resultado es el nacimiento de Budha, la Sabiduría esotérica (Mercurio o Hermes en Grecia y Egipto).

Se le representa como "tan hermoso", que incluso el marido, aunque bien consciente de que Budha no es la progenie de su culto de letras muertas, proclama al "recién nacido" como su Hijo, el fruto de sus formas rituales y sin sentido. (II, 499)

Directamente después de relatar lo anterior, Madame Blavatsky observa muy acertadamente en una nota a pie de página que "Vemos lo mismo en las religiones exotéricas modernas".

Una observación digna de mención en referencia a Mercurio es el hecho de que no tiene satélites. Los astrónomos son incapaces de explicar por qué esto debe ser así en referencia a este planeta, como también en el caso de Venus.

Ello se debe a que la ciencia sólo tiene una llave -la llave de la materia- para abrir con ella los misterios de la naturaleza, mientras que la filosofía oculta tiene siete claves y explica lo que la ciencia no logra ver. Mercurio y Venus no tienen satélites, pero tuvieron "padres" como la Tierra. Ambos son mucho más antiguos que la Tierra y, antes de que esta última alcance su séptima Ronda, su madre Luna se habrá disuelto en el aire, como las "Lunas" de los demás planetas,o no, según el caso, ya que hay planetas que tienen varias lunas, un misterio que ningún Edipo de la Astronomía ha resuelto. (I, 155-56 fn.)

Se dice que Saturno, Júpiter, Mercurio y Venus son los cuatro planetas exotéricos y éstos, junto con otros tres que, según Madame Blavatsky dice, "deben permanecer sin nombre", "eran los cuerpos celestes en comunicación directa astral y psíquica con la Tierra, sus Guías y Vigilantes, moral y físicamente, los orbes visibles que daban a nuestra Humanidad sus exterior e interior, y sus "Regentes" o Rectores con nuestras mónadas y facultades espirituales". En otras palabras, se aclara que "sólo siete de nuestros planetas están tan íntimamente relacionados con nuestro globo, como el Sol lo está con todos los cuerpos sujetos a él en su sistema". (I, 575-76)

Aunque una buena cantidad de raros y valiosos conocimientos esotéricos sobre los planetas se dio a conocer por primera vez en escritos teosóficos teosóficos (por ejemplo, el relativo a la Cadena de los Siete Globos interpenetrándose unos a otros, de los cuales los cuerpos celestes visibles forman un solo Globo, el del medio o cuarto), H.P.B. repite en varios lugares de La Doctrina Secreta la idea de que nadie "podría esperar que las enseñanzas secretas le sean explicadas a fondo y completamente, antes de haberse comprometido irremediablemente con la Hermandad y pasado por lo menos por una iniciación" (I, 164).

Por lo tanto, siempre anima al estudiante a utilizar su intuición a cada paso y a recurrir en la medida de lo posible a esta divina facultad de Buddhi ( 6º principio del ser Humano ) que yace latente en él y con la cual el planeta Mercurio está tan estrechamente relacionado.



Sin embargo, incluso un conocimiento casual y superficial de las enseñanzas teosóficas hará un efecto amplio e inequívocamente claro para todo lector inteligente, a saber, que los planetas no son meras esferas que titilan en el Espacio y que brillan sin ningún propósito, sino los dominios de varios seres con los que los profanos no están familiarizados hasta ahora; sin embargo, tienen una conexión misteriosa, ininterrumpida y poderosa con los hombres y los globos. Cada cuerpo celeste es el templo de un dios, y estos dioses mismos son los templos de DIOS, el Desconocido "No Espíritu". (I, 578)

 

El que es grande debe hacer de la humildad su base. El que es alto debe hacer de la humildad su fundamento. Así, príncipes y reyes al hablar de sí mismos usan los términos "solitario", "sin amigos", "de poca monta". ...

Así es que "Algunas cosas se aumentan disminuyéndose, otras se disminuyen aumentándose." ...

Por lo tanto, si un gran reino se humilla ante un reino pequeño, hará de ese reino pequeño su premio. Y si un reino pequeño se humilla ante un reino grande, ganará a ese reino grande. Así, el uno se humilla para alcanzar, el otro alcanza porque es humilde... .

Por lo tanto, el Sabio, deseando estar por encima de la gente, debe con sus palabras ponerse por debajo de ella; deseando estar delante de la gente, debe ponerse detrás de ella. De esta manera, aunque tenga su lugar por encima de ellos, la gente no siente su peso; aunque tenga su lugar delante de ellos, no lo sienten como una injuria. Por eso toda la humanidad se deleita en exaltarlo, y no se cansa de él.

-Tao Te King


LISTA DE ARTÍCULOS POR TEMAS

CURSO Y CLASES DE TEOSOFÍA


CONTENIDO DEL CURSO:

1.       Reencarnación
2.       Karma
3.       Los Maestros de Sabiduría, fuente de la Teosofía
4a.     La Mente y la Conciencia
4b.     La Mente Personal y Universal
5a.     El Cuerpo Astral
5b.     Los poderes del cuerpo astral
6.       Estados después de la muerte
7a.     El sueño y los sueños
7b.     Visiones y Meditación
8.       Ciclos
9a.     Evolución de la Mente y la Materia Cósmicas
9b.     Evolución de la Conciencia
10.     Leyes psíquicas